Ancestralmente llamado Mauƞa ʹĒʹo, se ubica en la parte Noreste de la isla. Este volcán de 150 metros de altura, de gran magnitud histórica y con un valor arqueológico invaluable.

Esta Cantera alberga a cientos de Moai en su ladera por el exterior y el interior de este, algunos están de pie terminados, otros a medio terminar, algunos no tuvieron un buen final y se quebraron en el trayecto hacia su plataforma u otros que por alguna razón fueron abandonados en el camino. Este es el escenario de obras maestras que acogió a cientos de escultores y artistas que con sus  toki, principal herramienta utilizada para el tallado, crearon perfecta y  lentamente las estatuas que coronarían los Ahu. 

La roca volcánica que dejó esta montaña de lava a sus alrededores hizo que de aquí se sacara la principal materia prima para construir los Moai. Los escultores tallaban la figura directo en el muro vertical, le daban todas sus características e iban tallando su alrededor para despegarlo de la roca madre, dándole en su parte posterior una forma de quilla que luego se cortaba e iniciaba el descenso del moai por la ladera del volcán hasta un hoyo que lo detenía de pie para retocar la espalda. Ya estaba listo para iniciar su transporte.

Rano Raraku es un atractivo que ofrece hermosos paisajes y cientos de Moai tallados por diferentes manos, con diferentes características y alturas. Por el costado este del volcán, se encuentra el único Moai de cuerpo completo y facciones más definidas, pero de rodillas en postura de ceremonia, su nombre es Tukuturi.